web 2.0

noviembre 20, 2009

Reconstrucción de parques en tiempos de crisis

Mientras aprendíamos a realizar reportajes en la materia de
Géneros Informativos, me llamó la atención algo que sucedía en unos parques
cerca de mi casa. Noté que desde que los habían
remodelado, la costumbre de ir a los parques en las tardes estaba
regresando. Niños de distintas edades y niveles socioeconómicos
jugaban juntos mientras sus madres los cuidaban.
Cuando el profesor nos encargó la realización de un reportaje, decidí hacerlo sobre
el tema. Realicé algunas entrevistas, investigaciones, y
observaciones. Esto fue lo que resultó.










Reconstrucción de parques en tiempos de crisis







Actualmente nuestro país se encuentra entre los primeros diez en índice de delitos con violencia. Desde inicios de los años ochenta, se ha observado un crecimiento notorio en estas cifras, y conforme pasan los años va en aumento. La delincuencia no es lo único que ha ido creciendo en los pasados años, sino también la percepción que tienen las personas sobre su sociedad, el miedo ha ido aumentando y las familias ya no se sienten seguras en las calles.


Cuando éramos pequeños nuestros padres o abuelos nos contaban cómo pasaban los domingos en la tarde sentados en un parque o dando la vuelta respirando aire fresco. Era algo tan común como hoy día ir a dar la vuelta a la plaza. Las cosas fueron cambiando, los hábitos también.


Según datos de la Cámara de Diputados de nuestro país, en el lapso de 1991 al 2004, el número de denuncias registradas por las procuradurías locales han tenido un crecimiento de cerca del 85 por ciento. Y no sólo las denuncias fueron incrementándose, sino también el miedo de la gente de salir libremente como lo solía hacer.


El asalto en las vías públicas es el que tiene mayor índice, y a su vez es el que menos se denuncia. Por lo mismo que en algunas partes de la república se ha hecho algo de la vida diaria de los ciudadanos. Nada fuera de lo común. Además que las autoridades no siempre responden bien ya que al ser delitos “menores” y muy repetitivos no le dan el seguimiento que los ciudadanos esperan.


Todo esto lleva a una indiferencia y constante inconformidad de la sociedad con sus autoridades porque no les resuelven sus problemas diarios. Así que en vez de dejar el asunto en manos de la autoridad, optan por abstenerse de ir a ciertos lugares públicos y terminan quedándose en su casa. Ocasionando, un cambio en los usos y costumbres que nos heredaron.
Hoy día, se está intentando recuperar aquella confianza que se ha perdido; un intento por recuperar antiguas tradiciones y hacer que la gente regrese a espacios públicos al aire libre, es el que está realizando la Secretaría de Desarrollo Social.


La SEDESOL cuenta con el programa “Rescate de Espacios Públicos”, en Veracruz, la coordinadora es la Ing. Claudia Evelyn Padilla Vázquez. Este programa se encarga de restaurar y embellecer ciertos espacios públicos al aire libre con el fin de que la sociedad recupere su seguridad y crear un cambio positivo en ciertos problemas sociales.


Para que la SEDESOL aplique este programa a algún parque, alameda, plazas, espacios verdes, etc., se requiere que sea en una zona de cierto nivel y popular que cuente con un espacio como este que muestre gran deterioro físico, inseguridad social, así como indicios de conductas de riesgo como adicciones o violencia. Una vez que la SEDESOL restaure el área, será el gobierno municipal el que quede a cargo de su mantenimiento, será su responsabilidad.





En nuestro municipio de Boca del Río, el encargado es el Subdirector de Mantenimiento Urbano, Pedro Martínez Muñoz de la Oficina de Parques y Jardines. Él nos comentó que actualmente están dándole mantenimiento a 47 parques en la ciudad. Podan y tratan el césped cada 8 a 15 días dependiendo el clima. También cuidan los juegos infantiles, el cemento, así como el alumbrado de estos espacios.


La reacción de la sociedad ha sido increíblemente buena. El atractivo visual es muy grande y eso ha hecho que la sociedad empiece a acercarse a estos espacios.


No sólo los embellecieron sino que además, instauraron programas deportivos, así como actividades físicas gratuitas.


Así, no sólo habrá torneos de deportes sino que también se dan clases de zumba, salsa, aerobics. Y para los pequeños, los fines de semana se instalan inflables para que tengan mayor variedad.


En poco tiempo, estos espacios públicos se han ido popularizando más y más.


Si una tarde pasáramos por uno de estos parques, ya no estarían deterior


ados y vacíos como hasta hace poco. Ahora, estarían vivos. Llenos de niños jugando y corriendo, o andando en bici, mientras sus mamás los cuidan y platican con sus amigas. En alguna banca, debajo de un árbol, podríamos ver a una pareja de la tercera edad respirando aire fresco y viendo a la juventud correr.


“Pues yo llevo a mi hijo al parque porque siento que de vez en cuando debe ir, es necesario que juegue y corra libremente y sin ningún peligro, y la verdad quedaron muy bonitos los parques y me inspira confianza, no creo que algo malo nos vaya a pasar ahí”, así nos comentó la madre de un niño de 3 años en uno de estos parques en el Fraccionamiento Hípico.


También se han convertido en un destino para las parejas jóvenes. Les gusta caminar un rato por los parques mientras platican con sus parejas.


Estos parques se han convertido en un lugar de esparcimiento que no conoce edades ni niveles sociales. Hay de todo. Hasta vendedores de dulces.


Las viejas costumbres regresan. Y no sólo eso, sino que la sociedad se comienza a sentir segura. En tiempos de crisis hay que despejar la mente, y dejar de preocu

parnos por todo. Es bueno que existan lugares donde uno pueda despejarse y simplemente disfrutar de la vida. Que convivamos como sociedad una vez más como nuestros abuelitos lo hacían, que podamos salir sin temer que algo nos pasará.


Ahora sólo queda esperar que estos espacios no se contaminen y que la armonía perdure aunque sea en estos espacios.